Para poder ir a St. Maarten tuvimos que hacer escala en San Juan de Puerto Rico. El vuelo que teníamos que tomar salía casi cuatro horas más tarde que el que nos traía desde Caracas -- cosa afortunda, ya que nos tocó hacer inmigración en el aeropuerto y pasamos más de una hora y cuarto en esa diligencia

Pareciera una estupidez el tener que hacer inmigración cuando uno ni siquiera va a quedarse en un país -- y de hecho lo es -- pero asumo que es "necesario" por la disposición del aeropuerto, gracias a la cual, todos los pasajeros de un vuelo internacional caen en terminales que los llevan a inmigración

Después de todo ese tiempo -- causado en gran parte porque a un imbécil oficial de inmigración le dió "cansancio" justo cuando le tocaba atendernos, así que decidió cerrar la taquilla, obligándonos a ir por otra, y a volver a hacer una cola -- retiramos nuestro equipaje, que ya estaba colocado en el piso porque la correa iba a ser usada para otro vuelo que venía llegando

Luego de entregar nuevamente la maleta (a poquísimos metros de donde la agarramos originalmente) para que fuera colocada en nuestro nuevo vuelo, tuvimos que volver a hacer otra cola para pasar por los rayos X, y por algo que por primera vez en la vida me obligan a hacer: pararme para ser "soplado". Si lo dijera en inglés tendría otra connotación ("blow me"), pero la verdad es que lo ponen a uno en una puerta que tiene salidas por las que echan fuertes -- y muy cortos -- chorros de aire, supongo que con la finalidad de que uno no entre con sus bacterias a los Estados Unidos

Y después de eso, ahora hay que pararse frente a una maquinita en la cual uno mismo se registra su salida del país, cosa que pareciera muy eficiente, pero que en realidad es otro fastidio más, ya que hay que hacer otra colita más (esta vez bastante más corta), poner el pasaporte para que la máquina lea el código de barras de la visa de uno, poner ambos dedos índices para las huellas y dejar que le tome una foto a uno...

Como dije, menos mal que nuestra conexión salía casi cuatro horas después de la llegada del vuelo desde acá, porque todo ese proceso que les conté nos tomó cerca de dos horas y cuarto

...y lógicamente, en el regreso nos tocó la misma cosa, aunque afortunadamente en inmigración si salimos rápidamente, porque el vuelo de regreso a Venezuela salía justo una hora después de que llegaba el de St. Maarten a San Juan. Con todo, a pesar de que no nos tardamos sino 10 minuticos en inmigración, igual tuvimos que salir corriendo por medio aeropuerto para llegar al avión, siendo los últimos en montarnos y sin poder registrar nuestra salida en la famosa maquinita

Menos mal que la estadía en St. Maarten fue tranquila y relajante, porque esto de tener que hacer escala en aeropuertos gringos no resulta para nada agradable...


No

# sacado del horno a las 13:15