No me las quiero dar de genio de la sociología ni nada por el estilo. Más que un estudioso del tema, creo que debo ser ESTUDIADO, pero en fin, no es de eso que les quería hablar hoy

Cada cierto tiempo aparece en mi blog, como supongo harán en los blogs de muchos de Uds., los comentaristas anónimos. Ahora, como en todas las cosas de la vida, hay anónimos buenos y anónimos malos. Hay gente que es anónima porque no tiene cuenta de Blogger. Hay gente que comenta como anónimo, pero luego se identifica en el texto que deja escrito

Y hay gente que se escuda en el anonimato para decir cuanta estupidez le pasa por la mente...

Lo que me llama la atención de esta gente es que cree que sus comentarios importan. Piensan que por no estar de acuerdo con algo que el escritor haya dicho o hecho, está justificado insultarlo y agredirlo verbalmente (bueno, textualmente). ¿Será que no se dan cuenta que a uno no le interesa?

Afortunadamente, a mi solo me han tocado -- hasta ahora -- dos anónimos agresivos de esos. Uno que me dice vagueta (recuerdos de 2do año de bachillerato -- esa fue la última vez que yo usé esa palabra) y que me va a acusar con 'mis jefes', y otro que me ofrece una sesión de sexo anal (no, gracias, no es mi preferencia) porque se siente ofendido por mis palabras

He estado pensando en la clase de gente que puede dejar ese tipo de comentarios, y la verdad que el sentimiento que me despiertan no es de rabia o de temor (que seguramente son los que ellos buscan), sino de lástima. Hay una expresión que usamos en mi familia para describir a una horrible ex de uno de mis hermanos: "todo lo malo se somatiza". Esta persona, malvada por naturaleza, cada día se iba poniendo más fea y más descuidada, y todo era por efecto de su rabia y su odio interno. Estos tipos que dejan esos comentarios deben sufrir algo parecido -- digo, eso es lo que me imagino, porque obviamente no los conozco, pero se me ocurre que para sentirse tan amenazados y agredidos por lo que escribo como para dejarme ese tipo de mensajes, sus vidas deben ser bien desagradables y duras. Deben sentirse paranoicos y perseguidos. Deben creer que la gente está en su contra. Como un escorpión arrinconado, solo saben atacar

Y lo cómico del asunto es que uno no escribe nada pensando en ellos. NADA. ¿Se imaginan? "A ver, ¿qué puedo escribir hoy que haga arrechar a fulano?". Sería una pérdida de tiempo...

Yo sé que dicen que a esos locos hay que obviarlos y no responderles, y que al escribir este post estoy violando ese lineamiento, pero es que me llama tanto la atención que haya gente así. Como diría el famoso torero, "hay gente pa' todo"

Al final del día, no solo no me importa que esta gente me deje comentarios 'ofensivos' o 'agresivos', sino que hasta me gusta, porque hace que mi contador de comentarios aumente...

# sacado del horno a las 08:30